¿Te gustaría preparar un delicioso pavo para tu próxima celebración, pero no sabes cómo sazonarlo para que quede jugoso y sabroso? No te preocupes, en este artículo de Tu Bolsillo te voy a enseñar los trucos y consejos que necesitas para conseguir un pavo perfecto. Sigue leyendo y descubre cómo sazonar un pavo para que quede jugoso.
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¿Qué necesitas para sazonar un pavo?
Para sazonar un pavo, lo primero que necesitas es elegir un buen pavo. Lo ideal es que sea fresco, de calidad y que tenga un peso adecuado para el número de comensales que vayas a tener.
Si no encuentras un pavo fresco, puedes usar uno congelado, pero tendrás que descongelarlo con suficiente antelación, siguiendo las instrucciones del fabricante.
Además del pavo, necesitarás los siguientes ingredientes para sazonarlo:
- Sal y pimienta al gusto
- Mantequilla o aceite de oliva
- Hierbas aromáticas, como tomillo, romero, salvia, laurel, etc.
- Ajos pelados y enteros
- Limón o naranja
- Vino blanco o caldo de pollo
También necesitarás una fuente o bandeja para hornear el pavo, papel de aluminio, un termómetro de cocina y un pincel de cocina.
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¿Cómo sazonar un pavo paso a paso?
Sazonar un pavo es muy fácil si sigues estos pasos:
- Limpia el pavo por dentro y por fuera, quitando las vísceras, el cuello y la bolsa de grasa. Sécalo bien con papel de cocina.
- Salpimienta el pavo por dentro y por fuera, frotando bien la sal y la pimienta por toda la superficie y la cavidad.
- Rellena la cavidad del pavo con hierbas aromáticas, ajos y limón o naranja cortados en trozos. Puedes usar las hierbas que más te gusten, pero te recomiendo que uses al menos tomillo, romero y salvia, que le darán un sabor muy rico al pavo. No rellenes el pavo con otros ingredientes, como pan, arroz, frutos secos, etc., porque pueden absorber la humedad del pavo y hacer que quede seco.
- Unta el pavo con mantequilla o aceite de oliva, usando un pincel de cocina. Esto ayudará a que el pavo quede dorado y crujiente por fuera, y jugoso por dentro.
- Coloca el pavo en una fuente o bandeja para hornear, con el pecho hacia abajo. Esto hará que el pecho, que es la parte más seca del pavo, se impregne del jugo que suelta el pavo al cocinarse.
- Cubre el pavo con papel de aluminio, dejando un poco de espacio entre el papel y el pavo, para que circule el aire y el pavo se cocine de forma uniforme.
- Precalienta el horno a 180ºC y hornea el pavo durante unos 45 minutos por cada kilo de peso. Es decir, si tu pavo pesa 4 kilos, tendrás que hornearlo durante unas 3 horas. Durante el horneado, abre el horno cada media hora y riega el pavo con el jugo que suelta, usando una cuchara o un cazo. Esto evitará que el pavo se seque y le dará más sabor.
- A mitad del horneado, da la vuelta al pavo, para que el pecho quede hacia arriba, y quita el papel de aluminio. Así, el pecho se dorará y el pavo quedará más bonito.
- Cuando falten unos 30 minutos para que el pavo esté listo, añade un poco de vino blanco o caldo de pollo a la fuente o bandeja, para que el pavo no se queme y tenga más jugo.
- Para saber si el pavo está listo, usa un termómetro de cocina e introduce la punta en la parte más gruesa del muslo, sin tocar el hueso. Si la temperatura es de 75ºC o más, el pavo está listo. Si no, déjalo un poco más en el horno, hasta que alcance esa temperatura.
- Cuando el pavo esté listo, sácalo del horno y déjalo reposar unos 15 minutos, tapado con papel de aluminio, antes de trincharlo y servirlo. Así, el pavo se asentará y conservará su jugo.
¿Cómo acompañar el pavo sazonado?
El pavo sazonado es un plato muy versátil, que puedes acompañar con diferentes guarniciones, según tu gusto y el de tus invitados. Algunas ideas son:
- Puré de patatas, que puedes hacer con patatas cocidas, mantequilla, leche, sal, pimienta y nuez moscada.
- Arroz blanco, que puedes cocer con agua, sal, aceite y una hoja de laurel, y luego saltear con mantequilla y perejil picado.
- Ensalada verde, que puedes preparar con lechuga, tomate, pepino, cebolla, zanahoria, aceite, vinagre, sal y orégano.
- Salsa de arándanos, que puedes hacer con arándanos frescos o congelados, azúcar, agua, zumo de limón y canela.
También puedes aprovechar el jugo que ha soltado el pavo al hornearse y hacer una salsa para acompañarlo. Solo tienes que colar el jugo, ponerlo en un cazo a fuego medio y añadir un poco de harina, sal y pimienta, removiendo bien hasta que espese.
Consejos y recomendaciones para sazonar un pavo
Para que tu pavo sazonado quede jugoso y delicioso, te recomiendo que sigas estos consejos y recomendaciones:
- Elige un pavo que se adapte al tamaño de tu horno y al número de personas que vayas a servir. No compres un pavo demasiado grande, porque puede que no te quepa en el horno o que te sobre mucho. Lo ideal es que calcules unos 500 gramos de pavo por persona.
- No sazones el pavo con demasiada antelación, porque la sal puede resecar la carne. Lo mejor es que lo sazones justo antes de meterlo en el horno, o como mucho unas horas antes, guardándolo en la nevera hasta que lo vayas a hornear.
- No hornees el pavo a una temperatura demasiado alta, porque puede quemarse por fuera y quedar crudo por dentro. Lo mejor es que lo hornees a una temperatura moderada, de unos 180ºC, y que lo cubras con papel de aluminio durante la mayor parte del horneado, para que no pierda humedad.
- No hornees el pavo más tiempo del necesario, porque puede quedar seco y duro. Lo mejor es que uses un termómetro de cocina para comprobar la temperatura interna del pavo, y que lo saques del horno cuando alcance los 75ºC o más. También puedes pinchar el pavo con un cuchillo y ver si el jugo que sale es claro y no tiene sangre.
- No cortes el pavo nada más sacarlo del horno, porque puede perder su jugo y quedar seco. Lo mejor es que lo dejes reposar unos 15 minutos, tapado con papel de aluminio, para que el jugo se distribuya por toda la carne y el pavo quede más jugoso y tierno.